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11.03.22

Con el objetivo de incorporar la innovación y la calidad en la educación de los niños de las guarderías, la Fundación Pere Tarrés organizó esta semana la jornada “La calidad en la etapa educativa de 0 a 3 años”, que puso a debate un conjunto de propuestas para el primer ciclo de educación infantil.

La importancia de potenciar la calidad en esta etapa radica en la evidencia científica que demuestra que "una educación de 0-3 de baja calidad tiene un impacto negativo en los ninos y niñas, mientras que una educación de alta calidad puede contribuir a reducir las desigualdades", según explico Fabricio Busi, Responsable del Área de Innovación y Desarrollo Digital y Sostenible de la Fundación.

Para mejorar la calidad educativa en estos centros, la Fundación Pere Tarrés presentó a representantes de la comunidad educativa que asistieron a la jornada un instrumento de observación del entorno de aprendizaje y una serie de propuestas para el desarrollo físico, social, emocional y cognitivo de los niños de entre 4 y 36 meses. La Fundación propone un modelo que incorpore todas las miradas y voces de los actores implicados en el proceso educativo como son las familias, los profesionales del sector, las entidades educativas y la administración pública; todos ellos agentes esenciales para la mejora de la calidad educativa en esta etapa.

Para Busi, la calidad educativa “se debe generar como producto de la relación entre el niño y el educador y en el desarrollo de actividades pedagógicas basadas en la interacción y en la creación de un entorno adecuado para el niño”. Asimismo, varios expertos aseguran que en esta etapa es “fundamental potenciar las necesidades básicas del niño, como la alimentación, la higiene o el cariño porque el 60% de los aprendizajes del ser humano se producen entre los 0 y los 9 años y las sinapsis –relaciones entre neuronas- se generan entre los 0 y 3 años”, como destacó durante la jornada Maria-Antonia Miret, Doctora en Pedagogía y Profesora titular del Grado de Educación Infantil y Primaria de la Facultad de Psicología, Ciencias de la Educación y el Deporte-Blanquera.

A la jornada asistieron representantes de la administración y de varias guarderías, y educadores y educadoras de diferentes centros educativos intervinieron en formato vídeo para exponer ideas y propuestas sobre cómo mejorar la educación a los niños. Entre las propuestas, los educadores y educadoras convinieron que es necesario fomentar la autonomía de los niños a través del juego y que es imprescindible adaptarse a los estados de ánimo, la personalidad o las preferencias de los niños y niñas para ver cómo reaccionan a los diferentes estímulos que se les presentan.

El objetivo de la jornada es construir un consenso compartido sobre cómo aplicar un marco de calidad en esta etapa que permita mejorar la educación de los niños de 0 a 3 años. Un proceso que sólo es posible con el apoyo de toda la comunidad educativa. "Se necesita a toda la comunidad para poder avanzar y solucionar los retos de esta etapa" recalcaba Sònia Recasens, Directora de Programas Educativos y Sociales de la Fundación Pere Tarrés.