04.12.25
La pobreza infantil sigue aumentando en Cataluña y ya afecta a uno de cada tres menores, según un reciente informe de la Plataforma de Infancia de Cataluña. La vulnerabilidad se ha cronificado en nuestro territorio y muchas familias catalanas viven en condiciones de extrema precariedad. En este contexto, para algunas familias comprar regalos para sus hijos e hijas en Navidad o Reyes puede convertirse en todo un lujo. Poder emocionarse con los regalos navideños es una experiencia de la que ningún niño o niña debería quedar excluido, por lo que la Fundación Pere Tarrés pone en marcha un año más su campaña navideña “Transforma su Navidad”.
La campaña tiene el objetivo de recoger recursos para ayudar a los centros socioeducativos de la Fundación a asegurar el desarrollo educativo y social de los más de 7.400 niños, niñas y jóvenes que asisten a estos centros cada tarde y, al mismo tiempo, poder garantizarles los regalos necesarios para que disfruten de una Navidad llena de ilusión. Por ello, la entidad recopila recursos de empresas e instituciones y los canaliza hacia los 97 centros socioeducativos y centros abiertos que forman parte de su red en toda Cataluña y las Islas Baleares. En estos espacios los niños reciben apoyo educativo y también acompañamiento emocional. A través de actividades educativas y basadas en el ocio, desarrollan habilidades sociales y competencias transversales, además de participar, en algunos casos, en programas de atención psicológica. Más allá de los valiosos aprendizajes que adquieren en ellos, estos centros funcionan a menudo como una necesaria desconexión de las situaciones difíciles que muchos de ellos viven en casa y como una red de apoyo para las familias, muchas de las cuales tienen graves dificultades económicas.
La colaboración de las empresas e instituciones es clave en la campaña y se puede materializar a través de tres vías: la donación económica, la donación de material educativo o juguetes y el apadrinamiento. Con esta modalidad, las empresas podrán apadrinar las cartas a los Reyes Magos que previamente los niños y niñas de cada uno de los centros han preparado en colaboración con los educadores y educadoras, y que incluyen juegos y juguetes para el centro, además de material educativo necesario para poder desarrollar la actividad diaria.
Las aportaciones permitirán desarrollar también nuevos programas de acompañamiento educativo y emocional para estos niños y niñas que asisten a los centros y hacer posibles proyectos como la financiación de tratamientos de salud oftalmológica y bucodental que las familias no pueden asumir, o la rehabilitación y mejora de algunos de los espacios educativos.
La pasada Navidad, 29 empresas, entidades y donantes particulares participaron en la campaña y cumplieron las peticiones de 37 de los centros socioeducativos de la Fundación. En total, 2.800 niños, niñas y jóvenes de familias en riesgo social pudieron disfrutar de estas aportaciones. “Tener un regalo en Navidad permite que muchos niños y niñas no se sientan excluidos, les da la sensación de normalidad y de igualdad de oportunidades”, ha manifestado Alana Hurtado, coordinadora de campañas sociales de la Fundación Pere Tarrés, que ha explicado el sentido de este proyecto:“ Muchos hogares no pueden asumir los gastos que suponen estas fiestas, y con esta campaña queremos echarles una mano y ofrecerles un pedacito de Navidad”.