FAMILIAS

BLOG DE LA FUNDACIÓN PERE TARRÉS

¿Quién quiere jugar conmigo un rato?

¿Quién quiere jugar conmigo un rato?

Bet Bartrina Comalat
Docente de cursos de tiempo libre educativo
Ver todos los artículos | Ficha de experta

06.06.18

Si tenemos niños en casa o nos relacionamos con ellos, seguramente alguna vez nos han hecho esta pregunta: ¿Quieres jugar? Los educadores, en general, tanto si somos familia del niño como si somos sus maestros o educadores de tiempo libre, somos los responsables de favorecer el juego entre ellos porque sabemos que es imprescindible para su desarrollo como persona. Para que el niño disfrute de un tiempo y espacio de juego es necesario que los adultos que le rodeamos tengamos una actitud abierta, confiada y positiva ante este recurso.

Nuestra actitud ante el niño y el juego hará que el juego se convierta en una actividad para hacerla solo o en compañía. Nuestro objetivo es crear un espacio de confianza, libertad y de creatividad, y una buena manera de hacerlo es divertirnos con ellos al tiempo que compartimos sus ilusiones y fantasías.

Cuando el niño juega solo se encuentra con él o ella mismo, entrena la memoria y desarrolla diferentes habilidades. Cuando el niño juega con sus amigos y compañeros comparte, organiza, cede y participa desde la propia iniciativa y la de sus compañeros de juego.

Jugando en el esplai o al cau - o en cualquier espacio de ocio - el niño toma como modelo su monitor o monitora o responsable que la acompaña a participar, elegir, saber perder o saber ganar, estos son, entre otros, aspectos a trabajar. La acción del educador será muy relevante respecto la manera de hacer y ser del niño.

Jugar con la familia es muy satisfactorio: produce bienestar con uno mismo, se dan relaciones de complicidad entre los participantes y toma tanta fuerza el vínculo afectivo que provoca ganas de repetir el momento de juego.

Cuando hacemos referencia a la familia también hay que tener presente a los abuelos y las abuelas. Ellos son la voz de la experiencia y nos trasladan a su infancia cuando nos explican juegos tradicionales que tenemos que intentar conservar para reproducirlos posteriormente con las nuevas generaciones.

Jugar es bueno para todos y todas, sobre todo si tenemos en cuenta que mientras jugamos nos mostramos tal como somos y aprendemos sin parar.

Más información: 

https://criatures.ara.cat/primers-companys-joc_0_1148285180.html

http://www.jugarijugar.com/ca/blog/jugar-o-no-amb-els-nostres-fills-n2157

http://serveiseducatiusndavant.cat/web2015/jugar-amb-nens-beneficis-pares/

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